LA CREATIVIDAD PASTORAL EN SAN JUAN DE ÁVILA.

LA CREATIVIDAD PASTORAL EN SAN JUAN DE ÁVILA.

El título de esta reflexión  la Creatividad pastoral en san Juan de Ávila. creo que encaja bien con la vida y obra de nuestro paisano, pues como todos sabéis los propósitos iniciales de Juan de Ávila eran marchar a América proyecto que se truncó posiblemente porque le afectó el estatuto de limpieza de sangre teniendo que permanecer en Sevilla, pero en la mayor parte de su vida diríamos hoy  que actuó como cura vago, sin oficio ni beneficio, y sin estar directamente incardinado en una diócesis concreta , por lo que toda su actividad tuvo que estar sujeta a su creatividad.

La pastoral  llevada a cabo para la evangelización  por san Juan de Ávila creo que queda muy bien retratada en una carta que el Maestro Ávila dirige a Fray Luis de Granada, que le ha preguntado qué es lo que deberá hacer para cumplir bien con la misión que se le ha encomendado de predicar.

Juan de Ávila le contesta diciéndole que la misión recibida tiene como fin engendrar nuevos hijos para la gloria del Padre, por lo tanto lo más importante para ello es tener el espíritu de un padre cuidadoso de la vida de los hijos que ha de engendrar.

Este cuidado le dice literalmente es una particular dádiva de Dios y una imagen del paternal y cuidadoso amor que Dios nos tiene. De arte que yo no sé libro, ni palabra, ni pintura, ni semejanza  que así lleve al conocimiento del amor de Dios con los hombres , como este cuidadoso y fuerte amor que El pone en un hijo suyo con otros hombres ,  por extraños que sean; y ¡ qué digo extraños! ámalos aunque sea desamado; búscales la vida, aunque ellos le busquen la muerte; y ámalos más fuertemente en el bien que ningún hombre, por obstinado y endurecido que estuviese con otros, lo desama en el mal.

FRAY LUIS DE GRANADA.

Comenta estas palabras del maestro Ávila Fray Luis de Granada, su primer biógrafo: “Y lo que de esto puedo, en suma, decir es que no sabré determinar con qué ganó más ánimas para Cristo, si con las palabras de su doctrina, o con la grandeza de la caridad y amor, acompañado de buenas obras, que a todos mostraba. Porque así los amaba y así se acomodaba a las necesidades de todos, como si fuese padre de todos, haciéndose, como el Apóstol dice, todas las cosas a todos para ayudar a todos.           

Consolaba a los tristes, esforzaba a los flacos, animaba los fuertes, socorría a los tentados, enseñaba a los ignorantes, despertaba a los perezosos, procuraba levantar a los caídos, más nunca con palabras ásperas, sino amorosas; no con ira, sino con espíritu de mansedumbre, como aconseja el Apóstol. Todas las necesidades de los prójimos tenía por suyas, y así las sentía y les procuraba el remedio que podía. Con esto se juntaba una singular humildad y mansedumbre, que son las dos virtudes que hacen a los hombres más amables; y, sobre todo, era tan señor de ira, que no pienso, por cosas que acaeciesen, que jamás le viese nadie airado; afligido, sí, por los males ajenos, gozándose con los que se gozan y llorando con los que lloran” (Vida del Padre Maestro Juan de Ávila, Madrid (Edibesa) 2000, p.50-51).

Desde este espíritu la creatividad pastoral de  Juan de Ávila se abre en múltiples facetas  difíciles de resumir en pocas palabras. Más difícil aún perfilar la figura humana y sacerdotal del apóstol que la llevó a cabo.

Pienso  que la mejor caracterización de Juan de Ávila es aquella que lo presenta como un fiel discípulo de Jesucristo al que se siente  siempre referido con una triple referencia: una referencia teológica  por lo que no  sólo  busca al Dios de Jesús, sino el Dios que es Jesús, el misterio de Cristo, como dice fray Luis de Granada ´

Juan de Ávila no se movía hacia Dios principalmente   por la contemplación de la naturaleza física, por la grandeza y belleza de la creación,  sino por la contemplación del misterio de Cristo, ¡que bien aparece este aspecto de la espiritualidad de Juan de Avila  en su tratado del Amor de Dios,! un amor de Dios que se ha manifestado en Cristo:

JESÚS, MARÍA Y JOSÉ.

» quien nunca vio amor como éste que amando uno a otro se tornara El; dice en una carta amónos Dios cuando nos hizo a su  imagen y semejanza , pero mucho mayor amor es hacerse él a semejanza del hombre.

            Creo que es importante destacar  en orden a la pastoral cristiana este aspecto de la espiritualidad de Juan de Ávila, antes que predicar del gran y principal precepto del amor a Dios, es necesario convencer al creyente  del amor de Dios al hombre, y no un amor genérico: «Dios ama a todos los hombres,» porque una amor así suena a no amar a nadie, sino un amor personal Dios me ama a mí personalmente con un amor exclusivo y personal, de forma que todos los acontecimientos de mi vida personal están asumidos por la providencia divina para conmigo.

Y las características de este amor se han puesto de manifiesto en el misterio de Cristo : un amor gratuito, un amor que se anonada, un amor que perdona, amor que enriquece y transforma, amor que se esconde para regalar con una nueva presencia, amor que purifica, amor que marca el camino.

SÓCRATES MORALIZADOR GRIEGO.         

En segundo lugar una referencia vital por la que se relaciona con Cristo como con un viviente que obra y actúa en nosotros hasta el punto de decir  «sin mí no podéis hacer nada», este aspecto  ha de marcar también la pastoral cristiana, que debe evitar  todo el moralismo que  oscurezca  el mensaje evangelizador , por eso Juan de Avila no es un moralizador a la manera de Sòcrates o de Kant  o de cualquier predicador religioso, nisiquiera un moralizador cristiano, sino un evangelizador que anuncia siempre una Buena Noticia: La de que Dios por Jesucristo quiere llevar al hombre a ser imagen fiel de su Hijo si el hombre con su libertad no se lo impide y desde ahi instaurar el Reino de Dios( Cf Carta 222)

            Esta referencia  debe llevar a que la   la fe se convierta de alguna forma en  experiencia: » Por que si nos contentamos en conocer a Dios por fe, y no le conocemos por la noticia experimental   que del amor nace , tendremos que llorar como san Agustín y decir con él  ay de mí cuando no te conocía  y ay de mí cuando no te amaba.»( Carta 10)

Y en tercer lugar  con una referencia moral, la del discipulado, la del seguimiento   con un seguimiento que raya en la imitación hasta literal:

Pobre como Él, no quiso nunca atarse a nada que le impidiera anunciar el evangelio en puridad, corrigió con valentía a personas de todos los estamentos sociales, gozó de la libertad que nace del desprendimiento de las riquezas y de todo poder estructurado: rehusó varios obispados y el cardenalato; perseguido como Cristo , fue procesado por la Inquisición pasando un año entero en sus cárceles.  Obediente a una voluntad de Dios hasta el punto de poder decir se hizo obediente hasta la muerte y muerte de cruz. «Sacrificado hasta poder decir que aunque el cristiano tenga deseos y obras no se contenta si no han florecido las granadas, que quiere decir si tiene deseos de derramar la sangre por Jesucristo, porque aquello es darle verdaderamente amor , pues ninguno lo tiene mayor que dar la vida por quien ama.»Cf Carta 222)

 EL HIJO DEL HOMBRE NO TIENE DONDE RECLINAR SU CABEZA.  

Este tener siempre presente la vida real de Jesucristo hombre impidió  a Juan de Ávila perderse en su seguimiento y lo condujo a ser una reproducción fiel del Maestro, a lo san Pablo o a lo Francisco de Asís. «El dechado que el Padre ha dado a todo género de personas es su benditísimo  Hijo Jesucristo Nuestro Señor cuya doctrina y Vida ha de ser el nivel de la nuestra» ( Carta 11, 18-22.)

Pienso que es importante  en nuestros días , en los que muchos creyentes andan buscando un punto de referencia para identificarse como cristianos recordar que no hay otro punto de referencia que la persona de Jesucristo. Ser cristiano es ser discípulo de Cristo en medio de una comunidad de seguidores y discípulos; el Ser cristiano brota la vinculación personal y consciente con la persona histórica de Jesús de Nazaret. En ninguna otra religión , moral programa o proyecto tiene tanta importancia la persona del lider.

Este ha de ser el principio de identidad en la vida de todo cristiano. Primero de su identidad personal y subjetiva: El que le permita definirse asimismo . ¿ Quien soy yo? Un discipulo de Jesucristo. Esto y nada más. Cuando esta definición es asumida y uno al mirarse a sí mismo se autodefine como discípulo y seguidor, es cuando, quizás, se puede decir que el cristianismo está integrado en su persona.

Después de la identidad objetiva que como se ha dicho hace que Cristo sea metro y medida del comportamiento.

OBJETO DE BURLAS.         

Me temo que esta pérdida y búsqueda de la identidad cristiana   ponga de manifiesto que las personas y los grupos están, muchas veces, inconscientemente o más directamente  identificados a partir de otras referencias y no con ésta fundamental. –Yo soy conservador, progresista, de tal congregación, orden o comunidad cristiana Es por ello, que la sociedad puede encontrar dificultades , cuando se relaciona con grupos o personas que se dicen cristianos identificarlos también desde de esta referencia.

Con este talante de discípulo de Cristo Juan de Ávila cumple una variada tarea. La primera de ellas la predicación. Juan de Ávila se recorre múltiples ciudades y pueblos y villas especialmente de Andalucía: Córdoba, Baeza, Jerez, Sevilla Montilla, Zafra, Fregenal de la Sierra, Granada , Priego…

Cuando predicaba  Juan de Ávila la gente acudía a coger sitio en la Iglesia desde las primeras horas de la madrugada; la fuerza de su predicación se fundamentaba en la oración, larga oración ante Jesucristo Crucificado,» para estar bien templado»

El contenido es siempre profundo, fundado en la enseñanza de la Iglesia y en la Sagrada Escritura.

¿ Qué  valor pastoral le concedemos hoy a la predicación de la Palabra? Sigue siendo la predicación un medio pastoral importante ? ¿ Los cristianos están cansados de sermones ?

Juan de Ávila  fue procesado por la Inquisición por otra tarea que era la predicación  a grupos reducidos de personas, teniendo como base la explicación de las Sagradas Escrituras. Se conservan algunos comentarios suyos a la sagrada Escritura como a la Primera Carta de san Juan .

Juan de Ávila parte en toda su actividad  de que la vocación a  la santidad va dirigida a todo cristiano, sea sacerdote, religioso o religiosa o fiel cristiano, de forma que quiere poner al alcance de todo cristiano todos los medios de que dispone la iglesia para el acceso a la santidad : la oración y entre ellas la oración contemplativa, teniendo siempre como tema la Vida de Cristo. dice a este respecto:  «moriase  uno  de pena porque Dios no lo hacía contemplativo porque a veces concede Dios  en la plaza lo que no da al monje en la celda.».  La vida Sacramental, especialmente la participación en la Eucaristía

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INTEGRADOS EN UN PROCESO DE DESARROLLO

            Y junto a esto la  incorporación a un proceso de desarrollo de la vida cristiana.  Juan de Ávila tiene bien claro que la vida espiritual , en cuanto acción del Espiritu Santo, no se alcanza de forma improvisada, a no ser en casos de conversiones espectaculares, es necesario estar en una camino de crecimiento pasando por diversas etapas, esta característica de la pastoral avilista puede conducirnos a que al menos nos preguntemos si la pastoral hecha  principalmente desde las parroquias puede conducir al creyente por un camino de crecimiento que tenga como fin la santidad cristiana.

ANTIGUA UNIVERSIDAD DE BAEZA.        

Otra de sus tareas importantes fue la fundación de colegios o centros de formación y estudio, era este un objetivo por el que lucha constantemente  de forma que por todas las ciudades por donde pasaba procuraba dejar alguno, no siempre lo conseguía , pero así y todo fundó tres Colegios Mayores o Universidades: Baeza, Jerez y Còrdoba. 11 Colegios menores y el Colegio de Alcalá.

La formación de clérigos y sacerdotes es otra de sus acciones características, se vio rodeado de discípulos, no fue ajena a su pensamiento la fundación de una orden de sacerdotes especialmente dedicados a la predicación, vio en la Compañía de Jesús la realización de este sueño. Es posible que en la actualidad los clérigos, especialmente seculares,  necesiten disponer de  una atención cercana nacida de algún tipo de estructura diocesana que se cuide de ellos de forma que vivan su sacerdocio como miembros de un presbiterio unidos   hasta afectivamente con su obispo.

A todo ello hay que añadir sus escritos en los que aparece la rica variedad de su actividad pastoral, ellos nos muestran, en primer lugar , la cercanía que tuvo Juan de Ávila con los problemas de su tiempo.

               Tuvo que ingeniárselas para sacar adelante económicamente los colegios que fundó para enseñanza de la fe y gramática, incluso “patentando” varios inventos suyos de elevación de agua. Conoce la realidad de la familia y aconseja en los problemas matrimoniales y de educación de hijos. Da sus criterios sobre el gobierno y administración de la vida pública.

Aconseja a los poderes civiles sobre la necesidad de regular actividades públicas, como el juego, la prostitución, las diversiones, la atención a los pobres mendicantes  Habla de lo que las personas están viviendo: los negocios, las enfermedades, los juegos, las diversiones, la vida diaria.

CASA DONDE NACIÓ JUAN DE ÁVILA EN ALMODVAR DEL CAMPO.

Aunque hayan cambiado las circunstancias, el criterio evangélico, con que él atina a iluminar la realidad, tiene valor permanente, seguro que Juan de Ávila no se dejaría en nuestro tiempo arrinconar en la sacristía, el conde de Feria diría de él que Juan de Ávila sería un buen gobernante.

SELECCIÓN DE CARTAS POR ESAÚ DE MARIA.

Entre esos escritos  encontramos sus cartas, unas cartas que nos dejan ver su intimidad en muchos casos, pero lo más importante es su contenido.

En Montilla realizó la edición definitiva del Audi Filia libro que puede ser considerado  como el primer tratado de vida y perfección cristiana  escrito en lengua vulgar, los Memoriales del Concilio de Trento, las Advertencias al Concilio de Toledo

.Por medio de estos escritos Juan de Ávila se convierte en el maestro de vida espiritual de su tiempo, con él se relacionaron y aconsejaron San Juan de Dios , convertido  tras escuchar un sermón del Manchego y del que se conservan varias cartas aconsejándole sobre su fundación en favor de los pobres y enfermos, san Francisco de Borja, san Juan de Rivera, san Ignacio de Loyola. Santa Teresa de Jesús etc

El 10 de mayo de 1569 moría en Montilla, al enterarse Santa Teresa de Jesús de su muerte  cuentan que se puso a llorar: » Lloro dijo, porque pierde la Iglesia de Dios una gran columna.»

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